Educación Infantil
¿Qué
es la Educación Infantil?
La
educación infantil constituye la etapa educativa con identidad
propia que atiende a niñas y niños desde el nacimiento
hasta los seis años de edad.
La
educación infantil tiene carácter voluntario y su
finalidad es la de contribuir al desarrollo físico, afectivo,
social e intelectual de los niños.
Con objeto
de respetar la responsabilidad fundamental de las madres y padres o
tutores en esta etapa, los centros de educación infantil
cooperarán estrechamente con ellos.
La
Educación Infantil ha de propiciar en los niños
experiencias que estimulen su desarrollo personal completo. Como
punto de partida de un proceso que continuará en otros tramos
educativos, la etapa de Educación Infantil puede y debe
contribuir de manera eficaz a compensar todo tipo de desigualdades,
entre otras algunas carencias que tienen su origen en las diferencias
del entorno social, cultural y económico, sin que ello
signifique dejar de reconocer las diferencias psicológicas de
los niños, que han de ser educativamente atendidas. Puede
también, por ello, favorecer la integración de niños
y niñas en el proceso educativo.
¿Qué
objetivos persigue la Educación Infantil?
La
educación infantil contribuirá a desarrollar en las
niñas y niños las capacidades que les permitan:
- Conocer su
propio cuerpo y el de los otros, sus posibilidades de acción y
aprender a respetar las diferencias.
- Observar y
explorar su entorno familiar, natural y social.
- Adquirir
progresivamente autonomía en sus actividades habituales.
- Desarrollar
sus capacidades afectivas.
- Relacionarse
con los demás y adquirir progresivamente pautas elementales de
convivencia y relación social, así como ejercitarse en
la resolución pacífica de conflictos.
- Desarrollar
habilidades comunicativas en diferentes lenguajes y formas de
expresión.
- Iniciarse
en las habilidades lógico-matemáticas, en la
lecto-escritura y en el movimiento, el gesto y el ritmo.
de la Educación Infantil
La etapa
de educación infantil se ordena en dos ciclos. El primero
comprende hasta los tres años, y el segundo, desde los tres a
los seis años de edad.
El
carácter educativo de uno y otro ciclo será recogido
por los centros educativos en una propuesta pedagógica.
El currículo de la Educación Infantil se estructurará en torno a las siguientes áreas o ámbitos de experiencia:
Identidad y autonomía personal.
Medio físico y social.
- Comunicación y representación.
Las áreas deberán concebirse con un criterio de globalidad y de mutua
dependencia y se desarrollarán mediante la realización de experiencias
significativas para los niños.
La organización por áreas
constituirá un instrumento para que los Profesores de Educación
Infantil sistematicen, ordenen y planifiquen su acción pedagógica.
Principios Pedagógicos
En ambos
ciclos de la educación infantil se atenderá
progresivamente al desarrollo afectivo, al movimiento y los hábitos
de control corporal, a las manifestaciones de la comunicación
y del lenguaje, a las pautas elementales de convivencia y relación
social, así como al descubrimiento de las características
físicas y sociales del medio en el que viven. Además se
facilitará que niñas y niños elaboren una imagen
de sí mismos positiva y equilibrada y adquieran autonomía
personal.
Los
contenidos educativos de la educación infantil se organizarán
en áreas correspondientes a ámbitos propios de la
experiencia y del desarrollo infantil y se abordarán por medio
de actividades globalizadas que tengan interés y significado
para los niños.
Corresponde
a las Administraciones educativas fomentar una primera aproximación
a la lengua extranjera en los aprendizajes del segundo ciclo de la
educación infantil, especialmente en el último año.
Asimismo, fomentarán una primera aproximación a la
lectura y a la escritura, así como experiencias de iniciación
temprana en habilidades numéricas básicas, en las
tecnologías de la información y la comunicación
y en la expresión visual y musical.
Los
métodos de trabajo en ambos ciclos se basarán en las
experiencias, las actividades y el juego y se aplicarán en un
ambiente de afecto y confianza, para potenciar su autoestima e
integración social.